Rápida, práctica y efectiva. La fórmula casi perfecta para eliminar de raíz los pelos indeseados. No es
magia, la depilación definitiva requirió de décadas a prueba y error para competirles a los sistemas
tradicionales de depilación como la cera, las cremas depilatorias y las maquinitas (eléctricas o no) que
durante años, quincena a quincena, mes a mes, nos recordaban que “nada era para siempre”.
Con el desarrollo de tecnologías más precisas y el boca a boca como sus principales aliados, la
depilación definitiva logró por fin convertirse en uno los recursos estéticos más elegidos en todo el
mundo. Lo adoptaron las mujeres -principalmente para el vello de las axilas, el cavado y las piernas- y
también los hombres, que en general recurren a ella para reducir los pelos del pecho, la espalda y el
abdomen.
La depilación láser les da a los deportistas una mayor higiene debido a que baja el nivel de sudoración
al momento de entrenar. Además, al no tener vellos al momento de tener una herida disminuye los riesgos
de infección.
Para los deportistas profesionales y los que realizan a diario actividades físicas como el simple hecho
de salir a correr, una de las primeras razones por las cuales se realizan la depilación definitiva es
por la comodidad que entrega. Principalmente porque los hace sentir higiénicos y libres al realizar
movimientos en sus entrenamientos y también les brinda una mayor comodidad al utilizar ropas deportivas
olvidándose de la posibilidad de pasar un mal rato por culpa de los vellos indeseados.